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Mostrando las entradas de mayo, 2022

Dardo "el Pescado" 5. Dos caranchos

Dos caranchos miraban atentos desde arriba de uno de los arcos de la canchita, la quietud de esa mañana.  Cada tanto sus chirridos cortaban el ulular de la ventisca que se escurría por entre los pasillos que separaban los edificios del barrio. Algún memorioso dijo no hace mucho que toda esta zona era un bañado donde jilgueros y cabecitas negras entre otros, eran los dueños del lugar, llenando de música esos días.  Pero vino la autopista, luego a su vera el barrio, y los pocos pájaros que quisieron resistir la toma, fueros desalojados por el ensordecedor ruido de las máquinas viales y la tala de los pocos árboles del lugar, especialmente ligustros y paraísos. Esa tarde, cuando el viento aflojaba, un olor fétido se hacía presente, casi una marca registrada de este lado del barrio.  Entre los pastos que brotaban desde la zanja se veían los restos de una bolsa de consorcio envolviendo un perro despanzurrado seguramente por los caranchos y las ratas, habitués del baldío, el que por las tard

Con el buzo amarillo

(Dedicado a mi amigo Fabi) Yo creo que nadie quería ir al arco porque no era una empresa sencilla.  Se enseñaba el oficio de Arquero como quien lo hace con un aprendiz de carpintería o de albañil.   Mi llegada a Itu en el año 67 fue bienvenida por los pibes de mi edad, ya que al tratarse de un barrio muy pequeño, diría que fronterizo  (tres zonas según la Filcar lo rodeaban) aportaba un futuro integrante a los planteles vigentes.  Mejor dicho, esperarían a que le pudiese pegar a la número cinco para por lo menos armar un cabeza. Ante la inexistencia de probos en las porterías , fue que hube de aprender los gajes del oficio, desde una tribuna viendo al memorable Gato Marín, o leyendo notas y reportajes en la Revista Goles.  Y no mucho mas que eso. Así fue cómo las dos primeras cosas que puse en práctica fueron: marcar con el talón de mis botines (supongamos que tenía) sobre la imaginaria línea del  área chica, la posición de ambos palos del arco (o lo que lo formase), y dejar detrás de